Casi Ficción

Originalmente, iba a aburrirles con una sesión muy tediosa, hablando sobre los mediocres. Pero eso no es del interés del publico. Además, me arriesgo de perder los pocos lectores que estoy ganando. O eso espero. Antes de dejarlo a medias y perder los ánimos, subiré algunos de mis proyectos e ideas que tengo en mi mente. En realidad, mi más grande sueño es ver alguno de estos publicados, y mi más grande temor es el plagio. Y los miedos siempre tienen que ser vencidos. Hasta aquí el preámbulo. Ahora, los proyectos a futuro son:

Odio a los gatos. Realmente los odio. No sé desde cuando, donde ni porqué. Simplemente los odio. Su forma de caminar, de mover la cola, de ronronear. Animales engreídos y ególatras. No los tolero. No, claro que no. Aun así, he tenido que soportar a mi hermana pequeña y su “minino”. El animalejo se comió un día mi almuerzo, tiró todo el arroz por el piso y se llevó el delicioso bistec. ¡Maldito! Casi lo ahorco. Pero no lo hice. ¿Por qué no lo hice? Le culpo a Edgar Allan Poe y uno de sus cuentos, “El gato Negro”. Tengo miedo de llegar al extremo de matar a un animal, mi repulsión es enorme, pero tampoco soy partidario del abuso animal.   Al final, mi hermanita tomó al peludo y lo abrazó, como si lo estuviera protegiendo (en realidad lo estaba asfixiando). Ella me mostró su pequeña y rosada lengua, para luego decir: “Tonto y lento, Negro no tiene la culpa de que seas tan tonto y tan lento.” Oh claro, que nombre tan original para esa bola de gérmenes al cual tanto adoras.   Ésa es mi vida

Nótese el sarcasmo, ya que realmente esta no es mi primera entrada en este blog. Durante un par de años (espero tengan paciencia, ya que cambio a modo Flashback) he intentado buscar un nombre para escribir un blog. Y un propósito. Pero no los hallé. Imaginé que el título de “cuarto desordenado” sería una idea “algo original”, pero me encontré con la lamentable noticia que a alguien ya se le había ocurrido semejante título. En un intento desesperado, le coloqué a regañadientes el título de “ Cinco Esteras”. No, el nombre del blog no me convencía, así que desistí de mi intento de ser un “Blogger”. Pero ahora, con un nombre de blog acorde, podré iniciar con los proyectos en mente. ¿Por qué “Casi Mediocre? La razón es muy sencilla. Tengo la mala tendencia de dejar las cosas a medias. Cuando no logro completar algo, me aburre y lo dejo allí. Pero, un momento ¿Eso no le ha pasado al menos, a más de la mitad de la población mundial? No estoy muy seguro de ello, pero en parte sí,